


Tenía que dejar constancia de esta joya junto a Baker Street Station. Desde que pones un pie dentro, la decoración y su ambiente bohemio te atrapan, la atención al cliente es inmejorable, la recepcionista fue muy atenta con todos los detalles, al subir a la habitación por el pasillo se puede disfrutar de un agradable recorrido y no hace mas que mejorar cuando una vez en la habitación descubres un pequeño oasis para relajarse, lo ideal cuando buscas tranquilidad. La habitación era amplia con una pequeña sala independiente del dormitorio, un amplio cuarto de baño con todos los detalles de un hotel de categoría, un colchón suave, normalmente soy muy exigente con el colchón ya que para mi no hay mejor cama que la mía y dormí plácidamente toda la noche. Por la noche disfrutamos de una cena que no hizo mas que elevar nuestra experiencia por todo lo alto, la comida no era solo buena, era exquisita, el servicio magnifico, no puedo encontrar imperfección alguna. Desayuno por la mañana antes de salir era la guinda del pastel. Recommendable no, LO SIGUIENTE!! Gracias a el equipo que hacen un trabajo increíble haciendo que los huéspedes nos sintamos especiales y con ganas de volver.
Excelente trato del personal, tanto en el checkin como en el comedor. Desayuno de lo mejor y la cena estupenda. Las habitaciones muy limpias y sin ruido para poder descansar. En definitiva, precio y calidad acorde con lo esperado.
La atención es casi tan genial como la ubicación del hotel. Si tengo que definirlo en una palabra sería Acogedor. El equipo del hotel y restaurante están siempre dispuestos a echar una mano. Sin dudas repetiría
Nos alojamos aquí en Semana Santa de 2022 y tuvimos una estancia perfecta. El hotel es una monería, ambientado en Sherlock Holmes, de hecho, la entrada del hotel por el restaurante, se encuentra en Baker Street. La habitación es amplia, cómoda y limpia y el baño muy bonito y moderno. En la habitación hay plancha y tabla de planchar. Descansamos muy bien y era un placer, después de todo el día visitando la ciudad, llegar a la habitación a descansar. El desayuno está riquísimo y hay variedad. El personal es muy amable y se vuelca en todo lo posible para cualquier cosa que te surja. Hay rincones preciosos en el hotel. Nos encantó la originalidad del gimnasio. La situación del hotel nos encantó. Era la primera vez que visitabamos Londres y lo teníamos todo a mano. Estación de metro a dos pasos, cercano a varios puntos de interés turístico. Muy céntrico y barrio agradable. Volvería a repetir sin duda.
Hotel en Marylebone, al lado del metro de Baker street y muy cerca de marylebone high street y cerca del metro de Bond street, oxford street y hacia el otro lado regent’s park. La habitación superior es mini como los hoteles en general en Londres, cama cómoda y vista a un patio mínimo. Personal muy amable, e ignorando emails varios de no te hacemos la habitación a cambio de un euro a una charity, te la hacen a diario. Agua y chocolate gratis, te imprimen entradas si necesitas. Relajado y majo, un buen sitio en Londres para quedarse.